Luz cálida y luz fría. Usos y recomendaciones
Luz cálida, luz fría
En World Light estudio trabajamos a conciencia todos nuestros proyectos de iluminación. Nuestros diseños lumínicos no solo tienen en cuenta la estética y la funcionalidad de la luz sino que también tenemos en cuenta los estados de ánimo o los ambientes que se deben generar en cada estancia. Por si fuera poco además asesoramos sobre la posibilidad de instalar sistemas de control de iluminación que puedan generar distintas escenas y puedan regular la luz en función de la utilidad de la estancia o el estado de ánimo que queramos generar en momentos diferentes del día.
Hoy vamos a tratar de aclarar las diferencias entre la luz cálida y fría y cómo se suelen utilizar en función de la estancia, lugar o uso que se le vaya a dar al espacio. La principal diferencia entre luz calida y luz fria es la temperatura de color, que definirá el uso de cada una. En función de la estancia recomendaremos el uso de la luz cálida o de la luz fría. Los valores de temperatura de color se miden en grados kelvin, que van desde unos 1700 K (muy cálido) hasta los 6500 K (muy fría).
La luz cálida más habitual se encuentra rondando los 2700K y la luz fría más habitual está en un rango entre los 5000 y los 6500 K. La luz fría emite mayor luminosidad que la cálida y se proyecta en los tonos de la gama de los azules. Curiosamente, en ese mismo rango se encuentra la luz solar y por ello muchos espacios interiores tratan de imitarla buscando los beneficios que provoca este tipo de luz en el estado de ánimo. La sensación de alerta y la productividad son los efectos que conseguimos en las personas que trabajan con esta luz.
El blanco neutro se encuentra justo en el medio del espacio entre los otros dos. En la escala kelvin, eso lo ubica alrededor de 4000 K.
Las tonalidades azules reducen los niveles de melatonina en el cuerpo. Esta es la hormona que se relaciona con el sueño. Por lo tanto, cuando este tipo de luz predomina en una habitación, las personas en ella suelen sentirse más despiertas. Las pantallas emiten luz azul y por ello se recomienda no exponerse a pantallas de móviles y otros dispositivos antes de irse a dormir.
Tipo de luz habitual para una cocinas
La mayoría de las cocinas cuentan con luz fría. La instalación de leds blancos fríos ofrece una luz más brillante y clara y nos permite visualizar mejor los alimentos que estamos preparando.
Tipo de luz en el espacio de trabajo
Las luces frías las hacen más estimulantes y aumentan el estado de alerta y la concentración. Por eso, se utilizan a menudo en los lugares de trabajo, con el objetivo de incrementar los niveles de productividad laboral.
Tipos de luz para un dormitorio o espacio pensado para la relajación y el descanso
La luz cálida es recomendable escogerla cuando se quiera crear un ambiente relajado. Espacios donde suelen predominar son, por ejemplo, los dormitorios. Dado que este tipo de iluminación se relaciona con la relajación, iluminar un dormitorio así, sobre todo antes de ir a dormir, puede contribuir a mejorar la calidad del sueño.
Las salas de estar son también espacios donde se usa, para que la decoración adquiera un toque de intimidad en un ambiente tranquilo.
Esperamos que te sea útil esta información y que te ayude a determinar que tipo de luz elegir para las diferentes estancias de tu hogar.